Diario de Melancolía

Había que esperar a que el sol nos viniera a encontrar para poder sacudirnos los pies. Esos pies que se encontraban tan pesados y cansados por el lodo que habíamos estado arrastrando. Pero hoy nos vimos frente a frente al despertar, nos reconocimos. Yo tan tuya, el reflejo tan mio. Te encontré de nuevo, te juro que no te suelto.

En una noche como cualquier noche, cuando llega el tiempo de dormir, de soñar y entregarse a ese periodo de tiempo donde parece que nos quedamos suspendidos en la nada, yo no quiero dormir. No esta noche. No esta vez. Mi cuerpo agotado me ruega por un poco de descanso... mis ojos se entrecierran y me forzan, pero temo, le temo a las imagenes que puedan aparecer esta noche. Le temo al sentimiento de la pasada noche, a las tristezas y la desesperación... no quiero llorar de nuevo en sueños y despertar con los ojos húmedos. No quiero despertar con ese dolor en el corazón. Lo único bueno que dejó la noche de anoche, fue el recordatorio de los momentos que ya se fueron, que ya no volverán, los momentos que no son mios ni lo serán jamás. Tus palabras, esas que me has dicho, solo me reiteran que esto es tan pasajero como las 8 horas en las que nos entregamos a nuestras almohadas... a esas horas donde las ilusiones vuelven.... a esas horas do...

Uno siempre reconoce el momento donde principia el fin. Quizá no sabemos de qué se trate exactamente, pero reconocemos que algo esta sucediendo. Y luego, cuando finalmente sucede, decimos algo como "claro, si yo lo sabia!", y nos reprochamos una y otra vez el no haber actuado de alguna u otra forma... sin saber que eso es inútil, que las cosas son, y hay caminos que no se pueden volver a trazar. Así yo reconocí el momento de nuestro primer final, recuerdo el momento y el lugar exacto cuando supe, mucho tiempo antes, que iba a pasar. Asi reconozco el momento ahora. Reconozco que se esta vaciando el tanque de oxigeno que nos compartimos desde el momento que nos reencontramos, reconozco que no es falta de ganas, que no es falta de amor, es simplemente, que no es. Y asi volveremos a vagar cada uno por su lado, porque creeme, tu tambien estas vagando, hasta que el Universo se vuelva a burlar de dos almas espaciales.

Hoy desperté con nostalgia de ti. De ti, de tus besos y tus abrazos. Quizá es porque el día despertó nublado, como un día despertaron tus sentimientos hacia mi... Hoy me duele el corazón cuando cierro los ojos y aparece tu recuerdo. - Me duele el corazón a todas horas porque a todas horas pienso en ti -. Hay días donde la melancolía me invade pensando en nosotros, en lo que fue, en lo que sigue siendo y en lo que, gracias a ti, ya no será jamás. Hoy desperté, contigo a mi lado, pero sin ti.