tengo ganas de cerrar los ojos y observar estrellas de muchos colores;
ver las nubes sonreirme.
Y hablar con los maestros.
Subir unos pasos en la escala.
Reir un poco más - Experimentar el éxtasis de la vida -
la vida más allá.
Y también drogarme para poder llorar un poco.
Limpiarme.
Desintoxicarme.
Sacar este maldito dolor, esta dolorosa enfermedad
que llevo sin conocimiento de causa ni razón.
Solo aparece, por segundos - me atormenta, me distrae,
y se va -.
Por eso quiero estirar mis brazos, como lo hiciera
Jesús en la cruz, y dejarme caer.
Minutos y horas, solo escapar.
Escapar para volver por mí.
Comentarios